La vainilla es una de las más valoradas especias, para nosotros es una joya. El aspecto de esta vaina que se obtiene de una planta tropical trepadora que pertenece a la familia de las orquídeas, no hace justicia a las cualidades que ofrece, aunque cuando más la conoces, más bonita te parece.
El azúcar avainillado es muy utilizado en la elaboración de bizcochos, magdalenas, flanes y siempre que algún plato aprecie un sabor dulce avainillado, incluso para endulzar un café. Aporta ese aroma y sabor que, no sabemos por qué, muchas veces recuerda a la infancia, cuando saboreamos la vainilla nuestro semblante hace no tarda en dar muestras de ello.
Como Prepararla:
Pasos:
A partir de unos 200 gramos de azúcar glass y una vaina de vainilla, obtendremos un azúcar avainillado en unos días. Dispón el azúcar molido en un frasco con cierre hermético, abre una vaina de vainilla por la mitad e introducirla dentro del azúcar. Cierra el frasco y déjalo reposar unos días, cuando lo abras y te inunde el aroma a vainilla, ya podrás utilizarlo.
El aroma de la vainilla es tan potente que incluso el tarro utilizado quedará impregnado de ese aroma, y siempre dispondrás del recipiente ideal para tu azúcar avainillado. Cada cierto tiempo deberás cambiar la vaina, esto dependerá de la cantidad de azúcar que prepares y el tiempo que tardes en utilizarlo, te darás cuenta según el aroma que tenga el azúcar.
0 comentarios:
Publicar un comentario